Debate

Herencias ocultas de la reforma liberal del siglo XIX

Carlos Monsivais

Demasiado, algo más que muchísimo y menos que todo, ocurre durante cien años en el entrecruce y la fusión de las ideologías, los sistemas económicos, los protagonistas, las batallas, los problemas inesperados y el público o el pueblo que insiste en participar. En el siglo XIX de México suceden, entre otras situaciones, el (desdichado) primer imperio, la ronda de las presidencias malogradas, la invasión norteamericana, la pérdida de una parte (substancial) del territorio, la Reforma liberal, la presidencia de don Benito Juárez, la gran batalla por la definición de lo nacional, las arcas siempre vacías y la mala educación que imparten, por así decirlo, el Padre Ripalda y el odio a la laicidad. Un grupo de liberales talentosos, valientes, lúcidos, construye simultáneamente la literatura y la historia de las nuevas libertades. Al edificar (casi de la nada) la República, se enfrentan a los pobres constituidos o con ganas de constituirse, a los representantes de la religión organizada, y al analfabetismo y el caos, el dúo dinámico del aislacionismo nacional. Escriben donde pueden y todo el tiempo, toman las armas, redactan las leyes, dirigen secretarías de Estado, viven el nomadismo de la República que cabe en una corraza, resisten (al patético) segundo imperio, atienden al fusilamiento de su emperador y, lo central, están cerca de don Benito Juárez, lo apoyan y lo critican con vigor. Son ellos, entre otros, Juan Bautista Morales El Gallo Pitagórico, Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez, Ignacio Manuel Altamirano, Manuel Payno y Vicente Riva Palacio, y sus obras, algunas de las grandes herencias ocultas de la nación. Acercarse a su legado es dialogar con una parte primordial de nuestro pasado y, sin duda, de nuestro presente.

Sobre Carlos Monsivais

Carlos Monsivais(1938-2010). Narrador, periodista y ensayista nacido en la Ciudad de México. Desde muy temprana edad participó en suplementos y revistas culturales. Estudió en la Facultad de economía y en la Facultad de filosofía y letras en la UNAM. Renovador de la crónica y del ensayo literario, intelectual indispensable en la vida política y social del México contemporáneo, Monsiváis produjo una obra tan vasta como la profundidad de sus reflexiones, un compromiso permanente por la cultura popular de su país y una militancia en sintonía con la mejor tradición crítica y liberal latinoamericana. En más de cincuenta años de trabajo periodístico y literario constantes, Monsiváis creó su propia galaxia a través de libros indispensables que configuran y perfilan a la cultura popular y a la sociedad civil mexicana como Días de guardar, Entrada libre, Escenas de pudor y liviandad, Los rituales del caos y No sin nosotros o de ensayos literarios de largo aliento como Amor perdido; Salvador Novo, lo marginal en el centro; Aires de familia y Cultura y sociedad en América Latina, por el cual obtuvo el premio de ensayo Anagrama en 2000. Para Monsiváis, su mejor universidad fue su obra abierta publicada en cientos de ensayos, crónicas, debates, artículos, cartas, reseñas, prólogos y libros en coautoría. Por su contribución a la ligüística y a las letras mexicanas, obtuvo el Premio Nacional de Ciencias y Artes, en 2005, y el Premio de Literatura de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en 2006. Se le otorgó el doctorado honoris causa en la Universidad de Arizona y se distinguió como conferencista constante en decenas de centros de estudios mexicanos y en el extranjero. Su aportación a la libertad intelectual es tan precisa como su memoria privilegiada y tan lúdica como su colección privada de 10 mil piezas de pintura, grabado, caricatura, miniaturas, fotografías y maquetas que se exhiben en el Museo de Cultura Popular El Estanquillo, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

COMPARTIR

También te pueden gustar:

VER MÁS
Términos y condiciones
|
© Todos los Derechos Reservados 2019
twitterfacebookenvelopeinstagram